“Bullying”

Hable con su Hijo acerca de…
“Bullying”
(Acoso Escolar, intimidación entre estudiantes)    

Debido a los frecuentes actos de agresión y de violencia en los planteles escolares del país, el 28 de abril de 2008 se enmendó el Artículo 3.08 e incluyeron los Artículos 3.08a., 3.08b., 3.08c., 3.08d. y 3.08e. al Capítulo III de la Ley Núm. 149 de 1999, según enmendada, conocida como Ley Orgánica del Departamento de Educación de Puerto Rico. Dichas enmiendas establecen como política pública la prohibición de actos de hostigamiento e intimidación “bullying” entre los estudiantes de las escuelas públicas; disponer un código de conducta de los estudiantes; presentación de informes sobre los incidentes de hostigamiento e intimidación “bullying” originar programas y talleres de capacitación sobre el hostigamiento e intimidación “bullying” y la remisión anual al Departamento de Educación de un informe de incidentes de hostigamiento e intimidación “bullying” en las escuelas públicas.

Bajo ley, “bullying” se define como: “cualquier acción realizada intencionalmente, mediante cualquier gesto, ya sea verbal, escrito o físico, que tenga el efecto de atemorizar a los estudiantes e interfiera con la educación de éstos, sus oportunidades escolares y su desempeño en el salón de clases”. El comportamiento antes descrito puede manifestarse por medio de un sinnúmero de modalidades, tales como: amenazas, bromas de mal gusto, sobrenombres, exclusión de grupos y por supuesto, a través de agresión física. La consecuencia que este tipo de conducta puede tener en los niños es desastrosa, tanto a corto como a largo plazo. Quienes han sido víctimas de un abusador o “bully” padecen en mayor grado que sus semejantes, de los siguientes problemas: depresión, soledad, ansiedad, baja autoestima e incluso llegan a pensar en el suicidio. Por su parte el abusador o “bully” puede mostrar impulsividad, falta de empatía, dificultad para seguir patrones y actitudes positivas hacia la violencia.

Los padres deben educar a sus hijos acerca de “bullying” (hostigamiento, intimidación, acoso) proporcionando información a un nivel que el niño/a pueda entender. Es importante prepararse y conocer la información que van a compartir con ellos, considerando cómo van a manejar sus preguntas y emociones. Los padres deben estar dispuestos a:

• Escuchar. Es la historia de su hijo, déjelo que se la cuente. Él podría estar sufriendo emocionalmente por la forma en que ha sido tratado.

• Confianza. El saber que un niño esta siendo acosado puede ser muy impactante. Para ser buen defensor, los padres necesitan reaccionar en una forma que anime al niño a confiar.

• Dar apoyo. Dígale al niño que no es su culpa y que él no merece ser acosado. Los padres necesitan reafirmar a su hijo diciéndole lo maravilloso que él es. Deben evitar los comentarios que pre-juzguen a su hijo o al niño que abusa. Su hijo posiblemente ya se sienta aislado y escuchar comentarios negativos de sus padres, puede aislarlo aun más.

• Ser paciente. Puede ser que los niños no expresen sus sentimientos inmediatamente. Hablar acerca de “bullying” podría resultarle difícil ya que pueden temer una venganza de parte del acosador, o pensar que aun si los acusan ante un adulto, nada va a cambiar. También el niño puede sentirse inseguro, retraído, temeroso o avergonzado.

• Explorar las estrategias de intervención. Discutir con sus niños acerca de las opciones que pudieran tener para lidiar con el acoso “bullying”. Como por ejemplo: ignorar al agresor, como si no lo oyera, no llorar ni enfadarse, no mostrar que le afecta, responder al agresor con tranquilidad y firmeza, ironizar o tratar con humor lo que le diga, alejarse o correr si es necesario, si cree que puede haber peligro, ir a un lugar donde haya un adulto, etc.

Ayude a sus hijos a reconocer la conducta “bullying” al hacerles preguntas acerca de su situación. Las siguientes preguntas pueden ayudar; • ¿El niño te pegó a propósito? • ¿Te lo hizo más de una vez? • ¿Te hizo sentir mal o te dio coraje? o ¿Cómo te hace sentir esa conducta? • ¿Supo el niño que te estaba hiriendo? • ¿Es el otro niño más poderoso (por ejemplo, más grande, más fuerte) que tú?

Las variaciones a estas preguntas para el niño que se resiste a hablar acerca de la situación, pudieran incluir: • ¿Cómo te fue en el autobús? • ¿Con quién te sentaste en el almuerzo? • Me doy cuenta que te estás enfermando muy seguido y que prefieres quedarte en casa. Por favor cuéntame acerca de eso. • ¿Te están haciendo burla los niños? • ¿Hay muchos grupitos en la escuela? ¿Qué piensas de ellos? • ¿Te ha tocado alguien de una forma que no te gustó?

Otras opciones para ayudar a los niños a hablar acerca del acoso incluyen: leerle historias acerca de otros incidentes de acoso, hablar acerca de los eventos más recientes de acoso en las noticias, la televisión o en una película, entre otros.

Los niños con impedimentos que son elegibles para recibir educación especial no están exentos de ser victimas de acoso “bullying” por parte de otro compañero. Si éste es su caso, el PEI de su hijo debe incluir metas y objetivos a corto plazo e identificar los servicios o apoyos necesarios, para ayudar a prevenir e intervenir en contra del acoso. Algunas de estas metas podrían ser:

• Mejorar las destrezas sociales, tales como: compartir, esperar su turno o pensar antes de hablar
• Desarrollar la habilidad de mantener una conversación con otra persona
• Identificar las normas sociales que el niño no entiende por sí mismo
• Participar en grupos de amigos para practicar las destrezas sociales con los compañeros bajo la dirección del personal de la escuela
• Aumentar las destrezas de auto-defensa para que el niño se anime a decir “no” o “déjame en paz”
• Mejorar las destrezas del habla y lenguaje para que el niño pueda comunicarse mejor con sus compañeros
• Identificar y practicar maneras directas e indirectas de reaccionar, manejar y evitar el acoso.

El PEI de un estudiante, victima de acoso, debe incluir además la asistencia, servicios suplementarios, acomodos y apoyos necesarios. Por ejemplo:
• Vigilancia en pasillos o patios de recreo por el personal de la escuela
• Permitir al niño dejar el salón de clases antes que sus compañeros, para evitar incidentes en los pasillos
• Uso de cuentos sociales para ayudar a niño a entender las situaciones difíciles cuando ocurran
• Proporcionar información al personal de la escuela para que entiendan el impedimento del niño y su vulnerabilidad
• Proporcionar información a los compañeros del salón de clases para ayudarles a comprender la condición del niño y el por qué del uso de tecnología, asistente o intérprete (las cosas que le hacen ver “diferente”)
• Establecer un procedimiento en el que no se harán preguntas para remover a un niño de una situación donde ocurre una conducta “bullying’.

El acoso escolar es un fenómeno presente en muchas escuelas de nuestro país. En cualquier momento un estudiante puede estar en la posición de víctima, agresor o meramente espectador en un incidente de acoso o intimidación. No se trata de “cosas de niños” y puede traer graves consecuencias emocionales incluyendo el suicidio. Para poner freno a este tipo de incidentes en los planteles escolares, todos, padres y profesionales, tenemos que participar y trabajar activamente, de manera que podamos asegurarles a nuestros estudiantes un ambiente escolar armonioso y de respeto.